Epidemia de dengue en Latinoamérica alcanza cifras alarmantes en primer trimestre de 2024

Agencias

La epidemia de dengue en Sudamérica ha alcanzado cifras alarmantes en lo que va de 2024, con un notable incremento en casos y fallecimientos en comparación con el año anterior, especialmente en Brasil, país que ha superado su propio récord histórico anual de infecciones por dengue, sumando hasta la fecha más de dos millones de casos y 715 muertes.

La situación es especialmente preocupante en Brasilia, con 5 mil 774 casos por cada 100 mil habitantes. Las autoridades han proyectado que el número podría ascender a 4.2 millones para finales de año y han comenzado a ofrecer vacunación a pesar de la escasez de dosis.

En Argentina, el Ministerio de Salud reportó 151 mil 310 casos de dengue, siendo 134 mil 202 de ellos registrados en el presente año, con una incidencia de 321 casos por cada 100 mil habitantes y 106 muertes, 96 de las cuales ocurrieron en 2024.

Además, 19 de las 24 divisiones territoriales han notificado la presencia del virus, excluyendo solo a regiones patagónicas debido a condiciones climáticas desfavorables para los mosquitos. El Gobierno de Javier Milei ha optado por estrategias de prevención que no incluyen vacunación masiva, argumentando falta de evidencia sobre la efectividad de las vacunas en brotes actuales.

Por su parte, Uruguay alcanzó este lunes los 158 casos de dengue (62 autóctonos y 96 importados) tras sumar 10 nuevos casos en las últimas 24 horas, confirmó el Ministerio de Salud Pública en su reporte diario, en el que indicó que la mayoría de importados son de personas que viajaron a Argentina y a Brasil. Asimismo, la única muerte ocurrida hasta el momento es la de una persona con dengue, de la que se está llevando a cabo la investigación epidemiológica para determinar si el fallecimiento fue por la enfermedad.

En medio de la epidemia de dengue que afecta gravemente a Sudamérica, Paraguay también reporta cifras preocupantes. Desde septiembre de 2023, inicio del brote más reciente, hasta la segunda semana de marzo de 2024, el país ha sufrido 74 muertes debido al dengue, informó el Ministerio de Salud Pública y Bienestar Social. Los datos de la Dirección General de Vigilancia de la Salud muestran que el 35 por ciento de los fallecidos eran mayores de 60 años.

Perú también ha experimentado un incremento significativo con 79 mil 741 casos reportados en lo que va de 2024, un aumento del 262 por ciento en comparación con el mismo periodo del año anterior. Se han reportado 82 muertes, un salto considerable desde las 29 del periodo correspondiente en 2023. La incidencia de la enfermedad es de 233.77 por cada 100 mil habitantes, siendo La Libertad la región más afectada.

En Colombia, el Instituto Nacional de Salud ha registrado 55 mil 340 casos, con un 40.2 por ciento presentando signos de alarma y 1 por ciento de casos graves. Hasta el pasado 3 de marzo se han notificado 94 muertes probables, con 10 casos confirmados y 69 en estudio. La incidencia de dengue a finales de febrero de 2024 fue de 154.8 casos por cada 100 mil habitantes en riesgo, en marcado contraste con los 48.8 casos por 100 mil habitantes reportados en el mismo periodo del año anterior.

Ya en 2023, la Organización Panamericana de la Salud (OPS) alertó del considerable aumento en los casos de dengue en las Américas. El año pasado se registraron 4.5 millones de casos. Esta tendencia de alta transmisión se ha mantenido en 2024, con un incremento significativo en comparación con el mismo periodo del año anterior.

El dengue, cuyo principal vector de transmisión en casi todo el continente americano es el mosquito Aedes aegypti, afecta a personas de todas las edades, y según la Organización Mundial de la Salud, detrás de la expansión de la epidemia está el fenómeno climático de El Niño, como pone de manifiesto el hecho de que esté creciendo en todas partes del mundo, excepto en Europa, según detalló recientemente el director general de la OMS, Tedros Adhanom.

El aumento exponencial de los casos de dengue en América Latina pone de manifiesto, según los expertos, la necesidad de acciones preventivas y de control más efectivas, así como de una vigilancia epidemiológica constante para combatir el avance de la enfermedad en el continente.