El huracán Ian, de categoría 3, toca tierra en Cuba y amenaza Florida

Agencias

El huracán de categoría 3 Ian tocó tierra en la madrugada de este martes en La Coloma, en la provincia occidental de Pinar del Río en Cuba.

Minutos antes, el Instituto Meteorológico de Cuba (Insmet) anunció que la tormenta había ido ganando intensidad hasta convertirse en huracán de categoría 3 (sobre 5) en la escala Saffir-Simpson, con vientos sostenidos de hasta 200km/h.

Cientos de miles de residentes al occidente del país están sin electricidad.

Pinar del Río es la provincia más occidental de la isla. El gobierno cubano estableció la fase de alerta ciclónica para seis provincias occidentales, incluyendo la capital, La Habana.

Las autoridades ordenaron la evacuación a refugios a decenas de miles de personas.

Los pronósticos indican que Ian seguirá ganando fuerza mientras se dirige a través del Golfo de México rumbo a Florida, donde ya han comenzado las evacuaciones obligatorias.

El Insmet estima que la afectación en Cuba dure alrededor de cuatro horas, “hasta salir por un punto de la costa norte entre Puerto Esperanza (Viñales) y Santa Lucía (Minas de Matahambre)”.

El Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos (NHC, por sus siglas en inglés) dijo que “se esperan marejadas ciclónicas que pueden ser mortales, vientos con fuerza de huracán, inundaciones repentinas y posibles deslizamientos de tierra en partes del oeste de Cuba a partir de esta noche y hasta el martes”.

Camino hacia Florida

Cuando Ian se convirtió en un huracán de categoría 1 en la mañana de este lunes, las autoridades del estado de Florida (EE.UU.) instaron a los residentes a “hacer sus preparativos” para enfrentar la tormenta.

Se pronostica que, tras su paso por Cuba, siga su ruta por el noroeste del Caribe y llegue a la costa oeste de Florida el miércoles, donde se ubica Tampa, ciudad que no ha enfrentado un gran huracán en un siglo.

La trayectoria exacta del huracán es incierta, pero el gobernador Ron DeSantis advirtió sobre “amplios impactos en todo el estado”. A lo largo de la costa de la Bahía de Tampa, los estantes de las tiendas de comestibles se vaciaron rápidamente y hubo largas colas en las estaciones de servicio.