En ese sentido, afirmó que en estos dos años se ha trabajado con determinación y fuerza para visibilizar y darles voz a las mujeres que ocupan cargos públicos y a las minorías dentro del Congreso, no obstante, al parecer existe incongruencia entre los que se ha trabajado y lo que se está haciendo al interior de la Legislatura.
“La igualdad de género debe ser primordial en la integración del gabinete, ayuntamientos, en los distritos, en los distintos órganos colegiados, a fin de que puedan integrar y ocupar los cargos de dirección. Hemos pugnado prevenir y erradicar la violencia de género en todos los espacios y formas. Sin embargo, parece que se olvida ser solidarios, respetuosos y garantes de los derechos de las mujeres al interior del Congreso, anteponiendo intereses personales y de grupo”, afirmó la legisladora.
“Pero hoy lamentablemente en el Congreso de Oaxaca están por cometer una gran arbitrariedad, lo que significa un retroceso y una fragante violación política contra los derechos de las mujeres: violentar lo establecido en los artículos 33 de la ley orgánica, 21 y 22 del reglamento interior del congreso, los cuales establecen que la mesa directiva se integrará al principio de igualdad de género y que la presidencia de la misma será rotativa y será ejercida en forma alternada. En caso de no existir acuerdo, como es el caso, la presidencia de la mesa para cada año de ejercicio de la legislatura, recaerá en orden ascendente en un integrante de los tres grupos parlamentarios con mayor número de diputados”, acusó la diputada.
Por lo anterior, señaló que si el primer año de la legislatura, el grupo parlamentario del PT, con tres diputados, fue quien encabezó los trabajos de la mesa directiva y el segundo año fue el grupo parlamentario del PRI con seis diputadas y diputados, en ambos casos por un diputado, evidente que el grupo parlamentario al que le correspondería ocupar la Presidencia de la mesa, es el que se integra con dos diputadas, atendiendo al principio de igualdad de género, es decir correspondería a una mujer y a una minoría, sin embargo, esos intereses personales o de grupo ha provocado que se olvide la propia ley o hasta la palabras que algunos expresaron en tribuna.
“Es por eso que invito a mis compañeros diputados y compañeras diputadas a ser congruentes con lo que decimos y hacemos, y dejar que las mujeres alcancen puestos relevantes dentro del Congreso y fuera de él, para así trabajar con igualdad, a favor de todas y todos, rompiendo paradigmas desde adentro. Es tiempo de la igualdad, es tiempo de las mujeres”, concluyó López Acevedo.