En un pequeño manual virtual recogen las plantas medicinales que usa el pueblo mazateco
La cultura mazateca se reparte entre Puebla, Veracruz y Oaxaca, siendo este estado el que contiene a la mayoría de hablantes y poseedores de esta tradición e identidad. De ella, se desprende un ejemplo de la manera en que los abuelos tratan, de manera natural, a los diversos males que aquejan a la población.
Denominado Herbario Mazateco, este pequeño manual virtual alojado en la plataforma Contigo a la distancia, da ejemplos de lo que da la tierra y lo que es aprovechado medicinalmente por este pueblo.
El herbolario, escriben las encargadas de la investigación y la redacción Martha Guerrero García, Alejandrina Pedro Castañeda y Janeth González Cerqueda, resultó del trabajo de agradecimiento a la tierra y a la cultura mazateca.
“Vemos crecer la raíz de nuestros abuelos y abuelas todos los días en nuestra tierra. Queremos que sus conocimientos sigan vivos y valorados. El uso de la riqueza y variedad de plantas medicinales nos permite vivir en autonomía y libertad”, apuntan.
Añaden que la medicina natural o tradicional, como se le conoce, es “una integración del cuerpo, el alma y el espíritu: la parte invisible del ser humano, y de todo lo que lo rodea”.
En el Prefacio, se considera que “la grandiosidad de la madre tierra es rica y vasta”, pues “desde su vientre hace brotar una inmensa variedad de plantas: se trata de una farmacia viviente”.
Se agrega que, en la zona mazateca, los abuelos han heredado el conocimiento de las plantas medicinales “y espirituales”.
“Caminar por carretera, veredas y riberas es simplemente mágico y con toque misterioso: las plantas y flores desprenden aromas y llaman, sin necesidad de salir del camino y adentrarnos a los recovecos: ahí a la vera encontramos cantidad de plantas medicinales para curar cualquier mal”.
Exponen que como equipo de trabajo han caminado una corta brecha y que ha sido en ese corto espacio donde encontraron “las plantas excelsas usadas por los mazatecos desde tiempos inmemoriales”.
En el Herbario Mazateco aparecen la Xoxka, como llaman a la hierbabuena que se usa para desparasitar, curar el dolor de estómago, el vómito, la bilis, e incluso como antiespasmódico y estimulante, y el árnica, yá tojno, para curar y cicatrizar heridas internas y externas, o para quitar calenturas y reumas, pues lo mismo se puede beber que untar.
Se suma el xo´kjao, o cempasúchitl silvestre o ratón, pues para empacho, gripa y bronquitis se hace una infusión con un puño de flores, mientras que para gente biliosa se bebe en ayunas una taza de té, hecho con un puño de la flor seca.
Dicho herbolario, que contó con el apoyo de Fernando Pérez Alonso, en el arte y el diseño; de David García García, Luis Peralta García y Diego Flores Magón, en la producción y la impresión, y don Emiliano Juárez García, vecino de Loma Chapultepec y encargado del Archivo Herbolario, se puede consultar y descargar en el sitio electrónico:
https://contigoenladistancia.cultura.gob.mx/detalle/herbolario-mazateco