Agencias
Un grupo criminal secuestró a más de 280 estudiantes y profesores en el centro-norte de Nigeria, en una localidad del estado de Kaduna. El plagio ocurrió a primera hora de la mañana del 7 de marzo en la escuela de primaria de la Autoridad Educativa Local en Kuriga.
Casi una semana después de estos hechos, los secuestradores pidieron a las familias un rescate de mil millones de nairas (unos 567.000 euros), según informaron dos líderes de la sociedad civil local a agencias informativas.
“Nos han contactado, nos han pedido mil millones de nairas para liberar a los alumnos y los profesores. Amenazaron con matar a todos los cautivos si no reciben el dinero para finales de este mes”, dijo a EFE por teléfono Abdullahi Umar, líder comunitario en la localidad de Kuriga, donde sucedieron los hechos.
Umar subrayó que se trata de “una cantidad enorme de dinero” y que no saben cómo conseguirlo y explicó que los padres de los menores secuestrados y los vecinos de la zona han tratado de recaudar los fondos desde que los secuestradores se pusieran en contacto con ellos el pasado fin de semana.
“Pero no hemos reunido mucho. Pedimos al Gobierno y a personas bien intencionadas que nos ayuden. Dicen que el pago de rescates es ilegal pero no podemos dejar morir a nuestros niños”, agregó Umar.
Conmoción internacional
El secuestro, que ha conmocionado a todo el país y a la comunidad internacional, se produjo a primera hora de la mañana del 7 de marzo en la escuela de primaria de la Autoridad Educativa Local en Kuriga, cuando los atacantes -unos cien, según señaló a EFE entonces un residente- rodearon a un grupo de estudiantes y profesores y los empujaron hacia el bosque, donde algunos lograron huir.
También confirmó a EFE la petición del rescate el subsecretario de la oficina regional de la Coalición de Acción de la Sociedad Civil sobre Educación para Todos (CSACEFA, en inglés), Farouk Alhassan.
“Es indignante. Recibimos informaciones de que los bandidos exigen mil millones de nairas (…) El Gobierno debería intentar garantizar el regreso seguro de los niños y los profesores”, afirmó Alhassan.
Descartan el pago del rescate
Las autoridades nigerianas han descartado el pago de un rescate para conseguir la libertad de los cautivos.
En declaraciones a la prensa este miércoles en la capital del país, Abuya, el ministro nigeriano de Información, Mohammed Idris, aseguró que el presidente del país, Bola Tinubu, “ha ordenado que el Gobierno no pague ningún rescate a ninguno de estos elementos criminales”.
“Las agencias de seguridad están trabajando día y noche. Estos niños y estas personas que han sido secuestrados por criminales volverán a estar a salvo muy pronto”, aseveró.
Por su lado, el activista pro derechos humanos y exlegislador Shehu Sani, que representó en el pasado al estado de Kaduna en el Senado (Cámara Alta) de Nigeria, señaló a través de la red social X que “las negociaciones con los bandidos que secuestraron a los alumnos de Kaduna están bien mientras no impliquen grandes pagos”.
Según Sani, “tendría que ser una negociación donde no se mencionen céntimos” porque “estas informaciones sobre sus demandas de rescate son una locura escandalosa”.
Ataques incesantes
Algunos estados de Nigeria -sobre todo del centro y noroeste del país- sufren ataques incesantes por parte de “bandidos”, término usado en el país para nombrar a las bandas criminales que cometen asaltos y secuestros masivos para pedir cuantiosos rescates.
Los ataques se repiten pese a las continuas promesas de terminar con la violencia por parte del Gobierno nigeriano, que ha reforzado el despliegue de las fuerzas de seguridad.
A esta inseguridad se suma la ocasionada desde 2009 por la actividad del grupo yihadista Boko Haram en el noreste del país y, a partir de 2016, también de su escisión, el Estado Islámico en la Provincia de África Occidental (ISWAP, por sus siglas en inglés).