OPINIÓN: El retorno de Diódoro Carrasco a la Cañada

El proceso electoral que vive el estado de Oaxaca ha dejado una vez más en evidencia la calidad de la clase política que está disputando cargos de elección popular, pues para seguir viviendo del dinero del pueblo hoy postulan a sus hijos, hermanos o sobrinos para hacer creer a la ciudadanía que no son los mismos de siempre, pero en realidad son los mismos de siempre.

Algunos de estos casos notorios que son motivo de plática y crítica por el cinismo con el que se conducen son la hija de Eviel Pérez Magaña, Gabriela Pérez López, candidata a diputada plurinominal del PRI; o el hijo de Héctor Pablo Ramírez Puga, Pablo Alberto Ramírez Puga Dominguez, candidato a regidor de Hacienda del PRI para el municipio de Oaxaca de Juárez; o la hija de Irma Piñeyro Arias, Mariana Nassar Piñeyro, candidata suplente a la diputación federal del distrito 08 de Oaxaca por la alianza PAN-PRI-PRD.

Esa costumbre de querer heredar el poder, lamentablemente llegó también a la región Cañada. Diódoro Carrasco Altamirano, nacido en Cuicatlán en 1954, y quien fue gobernador de Oaxaca de 1992 a 1998, busca recuperar el tiempo perdido en esta región que fue olvidada por él mismo, mediante su sobrino Marco Arturo Carrasco Tena, hijo de su hermano Juan José Carrasco Altamirano.

Marco Arturo Carrasco Tena es el candidato de la alianza “Va por México”, conformada por el PAN-PRI-PRD, a la diputación federal del distrito 02 con cabecera en Teotitlán de Flores Magón. En la región Cañada y Sierra Mazateca, donde el PRI dejó de tener preferencia hace tres años, casi nada se sabe de este candidato; tiene dos cartas de presentación: director de la Fundación para la Reserva de la Biosfera Cuicatlán, A.C. –que fundó su mayor impulsor, su tío Diódoro Carrasco Altamirano en 1998­– y ser sobrino de Diódoro Carrasco.

Sin lugar a dudas, como lo expresan sus mismos allegados, su mayor carta de presentación es ser el sobrino de Diódoro Carrasco Altamirano. Y los electores de la Cañada y Sierra Mazateca también se preguntan: ¿Y qué hizo Diódoro por su región cuando fue gobernador, o diputado federal o cuando fue senador? Sería desafortunado que los votantes no tuvieran memoria.

Vale la pena que también tengan presente que Diódoro Carrasco Altamirano fue denunciado por el gobernador de Puebla –emanado de Morena­–, Miguel Barbosa Huerta, por el presunto uso indebido de recursos públicos que ascienden a 86 millones 089 mil pesos cuando fue secretario general de gobierno de esa entidad.

¡Vaya carta de presentación la que eligió el joven Marco Arturo Carrasco!

Entonces, ¿usted votaría por el retorno de Diódoro Carrasco Altamirano?