La importancia de abrir este banco comunitario de semillas en el ejido Unión Zapata, radica en que sus habitantes custodian la cueva de Guilá Naquitz, lugar donde se encontraron algunas de las muestras más antiguas de maíz, frijol y calabaza.
La cueva fue declarada Patrimonio de la Humanidad en 2010 por la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación, la Educación y la Cultura (Unesco).
El funcionamiento del banco comunitario de semillas está a cargo de un comité electo por los propios campesinos que prestan semillas con la condición de que, al obtener la primera cosecha, se les devuelva el doble de lo que entregaron, de esta manera más agricultores podrán aprovecharlas en el siguiente ciclo agrícola.
La Conabio dio a conocer que las próximas acciones que se realizarán son el establecimiento de lotes de producción de semillas y lotes demostrativos con innovaciones tecnológicas para mejorar la producción, donde se dará capacitación a las comunidades.
La creación de este banco fue impulsada también por el Instituto Nacional de Investigaciones Forestales, Agrícolas y Pecuarias (INIFAP) y la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp), a través del Proyecto Agrobiodiversidad Mexicana, que opera con recursos del Fondo para el Medio Ambiente Mundial (GEF, por sus siglas en inglés).
De esta forma, ya se cuenta con 12 bancos comunitarios de semillas en Oaxaca, lo que permite hacer una mejor selección y conservación de las semillas nativas.
Con información de Excélsior.