Primera ola de Covid-19 en Corea del Norte, con decenas de muertes y un millón de contagios

EFE

El régimen de Kim Jong-un atraviesa momento difícil por la llegada de la variante Ómicron a un país empobrecido, aislado del mundo hace años y que no vacunó a ninguno de sus habitantes. En estado de emergencia, el Gobierno instó a distribuir medicinas y estudia la posibilidad de confinamientos. Sin plan de inoculación cercano y reticente a aceptar la ayuda de su vecino del Sur y Estados Unidos, la situación no parece tener una resolución sencilla ni próxima.

Pyongyang reportó este lunes otras ocho muertes teóricamente vinculadas al Covid-19, elevando la cantidad de bajas a 50 desde que se notificó el primer positivo el último jueves. El panorama es desolador cuando la cifra de contagios escaló raudamente hasta 1,21 millones de habitantes.

Corea del Norte está transitando la primera ola de coronavirus desde el estallido de 2020 y la contagiosa variante Ómicron está azotando a una población que no recibió –ni planea recibir en el plazo inmediato- ninguna vacuna.

La preocupación llevó a Kim Jong-un a pedir que se mejore la distribución de medicinas para paliar los casos positivos. En una reunión con el politburó, reprochó que la orden de liberar y suministrar las reservas estatales de medicinas a las farmacias de manera ininterrumpida aún no está en funcionamiento y fue crítico de los encargados de la operación.

Alta tasa de contagio, bajo testeo y vacunación inexistente

Sin inoculantes ni una gran capacidad de testeo, ayer detectaron 392.920 casos potenciales (la manera en la que están contabilizando a los enfermos), según la agencia KCNA. De esa manera traspasaron la barrera del millón en cuestión de días. Pero con la baja cantidad de pruebas estiman que el número puede ser mayor.

No obstante, más de 648.000 ya se recuperaron y otros 565.000 están siendo tratados, indicó KCNA. La proliferación de enfermos preocupa por la debilidad del sistema sanitario que no podrá hacer frente a la crisis si la situación se recrudece.

Surcoreanos ven las noticias en una estación de tren en Seúl, el lunes 16 de mayo de 2022. Corea del Sur está dispuesto a ayudar en la crisis sanitaria.

En 2021, el régimen en el poder desestimó una donación de casi cinco millones de vacunas del mecanismo COVAX. Sin casos positivos en el país y las fronteras selladas para el exterior, sean personas de otros países o norcoreanos que no estaban en el territorio, el hermetismo funcionó hasta estas semanas.

Ahora Kim Jong-un dio luz verde para confinar “cada ciudad y condado”, según las autoridades lo crean necesario. También desplegará al Ejército para que ayuden a acelerar el despliegue de medicamentos.

Corea del Sur ofrece “no escatimar” recursos para ayudar a su vecino

Por el momento, Pyongyang no expidió oficialmente ningún pedido de asistencia, pero la agencia surcoreana Yonhap informó que se comunicaron por los canales diplomáticos tradicionales con China para solicitar apoyo.

Quien sí hizo pública su disposición a colaborar fue Corea del Sur. El nuevo Gobierno de Yoon Suk-yeol, quien llegó al poder bajo el lineamiento de ser distante con el vecino del Norte, dijo que propondrá abrir un diálogo con la Administración de Kim Jong-un.

“Si las autoridades de Corea del Norte aceptan, no escatimaremos en ninguna ayuda necesaria, como medicamentos, equipos médicos, vacunas contra el Covid y personal sanitario”, expresó Yoon en su primera aparición parlamentaria como jefe de Estado.

Hasta ahora, Pyongyang no se expresó sobre las declaraciones de Seúl en un momento en el que la relación entre ambos está completamente congelada. En tanto que Yoon le plantearía el problema al presidente estadounidense Joe Biden cuando se encuentren en la capital surcoreana el sábado.

Corea del Norte tiene severas diferencias con ambas naciones y no está claro si aceptaría una mano por parte de Seúl y Washington, aseguran los analistas.