Agencias
El papa Francisco defendió hoy el derecho de los pacientes terminales a tener unos cuidados paliativos y aseguró que, cuando se habla de enfermedades sin cura, hay que distinguir entre dos palabras que “confunden”: “incurable e incuidable”.
“Incluso cuando existan muy pocas posibilidades de curación, todos los enfermos tienen derecho al acompañamiento médico, psicológico, espiritual y humano”, dijo Francisco en un vídeomensaje difundido este martes a través de la Red Mundial de Oración del papa, que en el mes de febrero se enmarca en la Jornada Mundial del Enfermo.
El pontífice aseguró que, aunque algunos en fase terminal “no pueden hablar”, eso no significa que no conozcan a quienes les rodean y, si se les “toma la mano”, se puede apreciar que “están en sintonía” con los demás.
Además, Francisco recordó la frase del papa San Juan Pablo II: “Curar, si es posible, y cuidar, siempre”.
“No siempre se consigue la curación. Pero siempre podemos cuidar y acariciar al enfermo”, sostuvo.
En cuanto a las familias de estos pacientes, Francisco manifestó que “no pueden quedarse solas en esos momentos difíciles” porque “su papel es decisivo” y necesitan tener “los medios adecuados para desarrollar el apoyo físico, el apoyo espiritual, el apoyo social”.
Por último, el papa Francisco pidió una oración “para que los enfermos terminales y sus familias reciban siempre los cuidados y el acompañamiento necesarios, tanto desde el punto de vista médico como humano”.